Un tribunal federal estadounidense ha declarado ilegales la mayoría de los aranceles impuestos por Donald Trump y ha ordenado su suspensión inmediata. El tribunal concluye que el presidente se excedió en sus atribuciones al aplicar esas medidas sin el visto bueno del Congreso. La decisión afecta directamente a los gravámenes del 30 % a productos chinos, los del 25 % a bienes procedentes de México y Canadá, así como al 10 % aplicado a mercancías europeas.
El fallo se fundamenta en que Trump utilizó de forma incorrecta la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA), una norma de 1977 que permite tomar medidas comerciales extraordinarias en situaciones excepcionales. Según la corte, esta ley no otorga al presidente una autoridad ilimitada, y cualquier intento de eludir al Congreso es inconstitucional.
Aranceles congelados mientras el Supremo decide
El Tribunal de Comercio Internacional de EE. UU., compuesto por jueces nombrados por Ronald Reagan, Barack Obama y Joe Biden, ha dictado una orden judicial permanente. Esta paraliza los aranceles aplicados por Trump bajo la IEEPA, dejando sin efecto la mayor parte de su política comercial.
La decisión implica que los impuestos del 30 % impuestas a productos chinos, así como los aranceles del 25 % a determinadas importaciones mexicanas y canadienses, quedarían suspendidas. También se verán afectados los aranceles del 10 % que impactaban en bienes de la Unión Europea, como consecuencia de la misma legislación.
Eso sí, los aranceles del 25 % a coches, acero y aluminio seguirán en vigor, ya que se amparan en otra norma: la Ley de Expansión Comercial.
Diez días para aplicar la decisión judicial
La sentencia establece un plazo de diez días naturales para que las autoridades administrativas ejecuten la orden de suspensión. De mantenerse el fallo en las siguientes instancias, los aranceles quedarían congelados hasta que el Tribunal Supremo, de mayoría conservadora, decida sobre su legalidad.
Este revés judicial responde a una demanda presentada por el Liberty Justice Center, un centro legal independiente que actuó en nombre de cinco empresas afectadas por la política arancelaria de Trump. Estas compañías denunciaron pérdidas económicas por el aumento de costes derivados de los aranceles.
La Casa Blanca reacciona y recurrirá
La actual Administración ya ha anunciado que recurrirá la decisión. En un comunicado recogido por la CNN, el portavoz Kush Desai ha defendido la legalidad de los aranceles: “No corresponde a jueces no elegidos decidir cómo debe afrontarse una emergencia nacional. El presidente Trump se comprometió a anteponer los intereses de Estados Unidos, y el Gobierno está decidido a emplear todos los recursos del poder ejecutivo para hacer frente a esta crisis y recuperar la grandeza del país”.
Según Desai, los aranceles se impusieron como respuesta a lo que desde la Administración consideran una emergencia nacional, motivada por los déficits comerciales con otros países, el incremento del tráfico de fentanilo y la llegada masiva de migrantes.
Aranceles, poder presidencial y equilibrio de fuerzas
El núcleo del conflicto jurídico reside en el alcance de la autoridad del presidente para tomar medidas económicas unilaterales en contextos de emergencia. Aunque la IEEPA se creó para permitir una reacción ágil ante amenazas externas, la corte ha sentenciado que su uso no puede suplantar la función legislativa del Congreso.
Este fallo abre un nuevo capítulo en el debate sobre el poder presidencial en política comercial, especialmente en un momento en que las guerras arancelarias han alterado el comercio global y encarecido productos clave en sectores industriales y agrícolas.
Empresas afectadas y reacción internacional
Las compañías representadas en el litigio consideran la decisión como una victoria. Aseguran que los aranceles impuestos dañaron su competitividad y dificultaron sus relaciones comerciales con socios internacionales. Además, el fallo podría tener repercusiones en negociaciones comerciales abiertas entre EE. UU. y países como Canadá, México, China y la Unión Europea.
En el plano diplomático, la suspensión de los aranceles se interpreta como una señal de apertura, aunque todo dependerá de lo que ocurra en las próximas semanas si la Casa Blanca decide seguir adelante con el recurso.
Elon Musk anuncia su salida del Gobierno de EE. UU.
El multimillonario Elon Musk ha comunicado en su cuenta de X que su etapa como "empleado especial del Gobierno" de Donald Trump llega a su fin, tras manifestar su descontento con el proyecto de reforma fiscal impulsado por la Administración.
Musk dirige actualmente el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), desde donde ha intentado reducir el gasto público, aunque reconoce que la nueva ley de gastos aumenta el déficit presupuestario, algo que considera insuficiente y arriesgado para su labor.
Críticas al proyecto fiscal
En una entrevista reciente, Musk expresó su decepción por el aumento del gasto que contempla la legislación, especialmente en defensa y política migratoria, a pesar de que mantiene algunos recortes anteriores. Este proyecto acaba de aprobarse por estrecho margen en la Cámara de Representantes y debe pasar ahora al Senado.
Pese a estas críticas, el expresidente Trump defendió el proyecto alegando que era necesario para lograr consenso político y enfatizó la importancia de mantener los apoyos en estas áreas clave.
Puntos clave
- El Tribunal de Comercio Internacional declara ilegales la mayoría de los aranceles impuestos por Trump bajo la IEEPA.
- La decisión afecta a importaciones desde China, México, Canadá y la UE.
- El fallo considera que el expresidente se saltó al Congreso y actuó fuera de sus competencias.
- La Administración estadounidense ha anunciado que recurrirá la sentencia.
- Los aranceles sobre acero, aluminio y automóviles no se ven afectadas.