Quince líderes actuales que definen el poder empresarial hoy en España

En el ecosistema empresarial contemporáneo, la figura del líder corporativo ha dejado de ser una pieza decorativa o una simple prolongación institucional del poder económico. En un entorno donde la reputación se ha convertido en activo tangible, los nombres propios pesan —y mucho— en la percepción de valor, la capacidad de influencia y el posicionamiento de las compañías. El último informe del Monitor Empresarial de Reputación Corporativa (Merco) lo confirma: el liderazgo empresarial se mide, se ordena y se disputa.

La edición 2025 del ranking elaborado por Merco ofrece una fotografía reveladora de quiénes ocupan hoy el imaginario reputacional de las élites empresariales en España. Y lo hace no solo por reconocimiento público, sino también por valoración profesional, percepción de coherencia, visión estratégica y consistencia ética. Un liderazgo que, más allá de los resultados financieros, se sustenta en la credibilidad personal.

Juan Roig: siete años en la cima del capital simbólico

Por séptimo año consecutivo, Juan Roig, presidente de Mercadona, lidera el ranking con la puntuación máxima (10.000 puntos), consolidando su posición como figura empresarial de referencia en España. Su permanencia en la cima es mucho más que una cuestión de longevidad: representa un modelo de gestión basado en la proximidad, la reinversión social, el desarrollo del talento interno y una narrativa de empresa nacional comprometida con el entorno. Este modelo es el mismo que le ha valido a la cadena de supermercados la segunda posición en el listado de empresas, elaborado por la misma entidad.

Roig ha trascendido su papel como fundador para convertirse en símbolo de un tipo de liderazgo que combina eficiencia operativa, cultura del esfuerzo y un relato empresarial sin aspavientos. Su ejemplo sigue siendo una anomalía en Europa occidental: una empresa privada de capital nacional con gran escala, crecimiento constante y liderazgo familiar sostenido.

Ana Botín y Amancio Ortega: reputación en equilibrio

En segundo y tercer lugar se sitúan dos nombres que no requieren presentación: Ana Botín, presidenta de Banco Santander, con 9.424 puntos; y Amancio Ortega, fundador de Inditex, con 9.304. Ambos encarnan formas distintas de influencia: Botín desde la visibilidad institucional y la exposición internacional, Ortega desde una posición de bajo perfil pero altísima percepción pública.

La reputación de Botín está fuertemente ligada al proceso de modernización del banco y a su capacidad de maniobrar en entornos financieros complejos sin perder solidez estratégica. En cambio, Ortega, incluso retirado de la gestión operativa, sigue ejerciendo una influencia transversal como referente del éxito industrial, patrimonial y discreto.

Marta Ortega e Ignacio Sánchez Galán: nuevas consolidaciones

El cuarto lugar del ranking lo ocupa Marta Ortega, actual presidenta de Inditex, con una puntuación de 7.782. Su presencia consolida un relevo generacional en la reputación corporativa del país y reafirma la legitimidad de su liderazgo tras un proceso de sucesión muy mediático. La apuesta por la continuidad silenciosa, por el enfoque de marca y por el rediseño estratégico empieza a calar no solo en los mercados, sino también en la percepción pública.

Le sigue en quinto lugar Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, que asciende ocho posiciones hasta los 7.082 puntos. Su escalada en el ranking puede leerse como reconocimiento a su papel en la transformación energética de la compañía y al liderazgo ejercido en el debate europeo sobre transición verde. Galán es, a día de hoy, uno de los pocos ejecutivos españoles con voz propia en las mesas de poder internacionales.

Florentino Pérez, Josu Jon Imaz y Dancausa: liderazgo desde lo técnico

El sexto y séptimo puesto son para Florentino Pérez (Grupo ACS, 6.991 puntos) y Josu Jon Imaz (Repsol, 6.961), dos ejecutivos con trayectorias muy diferentes pero unidos por una gestión intensiva en sectores complejos y estratégicos. Imaz, en particular, protagoniza uno de los ascensos más significativos del año: sube 10 posiciones, gracias a su exposición pública, capacidad de interlocución y discurso sobre la transición energética realista.

En octavo lugar, María Dolores Dancausa, CEO de Bankinter, mantiene su presencia entre los diez primeros con 6.697 puntos, pese a descender una posición. Su estilo de gestión austero, directo y transparente le ha granjeado una sólida base de reconocimiento, sobre todo en el entorno financiero e institucional.

Isidre Fainé y Pablo Isla: la reputación heredada

Completan el top 10 dos figuras ya desvinculadas de la gestión operativa, pero con capital reputacional intacto: Isidre Fainé Casas, presidente de la Fundación Bancaria La Caixa (6.498 puntos), y Pablo Isla, expresidente de Inditex (6.491). Ambos representan la idea de legado: líderes cuya impronta continúa siendo evaluada con criterios de excelencia más allá de su cargo actual.

La permanencia de estos perfiles en el ranking refleja cómo la reputación, en su versión más profunda, se construye en el largo plazo, más allá del ciclo económico o del protagonismo mediático.

Subidas, irrupciones y señales del cambio

Más allá del top 10, el listado muestra movimientos tan inesperados como reveladores. Gonzalo Gortázar (CaixaBank) escala 13 posiciones y se ubica en el puesto 11, consolidando su liderazgo tras la integración de Bankia y el reposicionamiento estratégico de la entidad.

También destacan las subidas de Miguel Carballeda (Grupo Social ONCE), que avanza 20 posiciones, e Ignacio Rivera (Corporación Hijos de Rivera), que sube 25, demostrando que el reconocimiento público no depende solo de la dimensión empresarial, sino también del relato de marca, el compromiso social y la coherencia institucional.

En contraste, algunos nombres con proyección pública relevante, como José María Álvarez-Pallete, expresidente de Telefónica, o Antonio Huertas, de Mapfre, descienden varias posiciones, posiblemente como reflejo de un entorno de mayor escrutinio sobre la gestión reputacional.

Un liderazgo más plural, más visible y más cuestionado

El ranking Merco 2025 no solo da cuenta de quiénes son los líderes más valorados: muestra cómo están cambiando los códigos del prestigio empresarial. La irrupción de 29 mujeres en el listado total y la entrada de perfiles más técnicos, menos conocidos y más orientados al impacto social sugiere una transformación paulatina en el imaginario del liderazgo corporativo.

Más allá del tamaño de la empresa, de los resultados económicos o del volumen mediático, lo que este ranking pone en evidencia es que la figura del líder importa. Y mucho. Su capacidad de proyectar confianza, asumir compromisos reales y sostener una narrativa coherente es, hoy, uno de los activos más valiosos —y más expuestos— de cualquier organización.

Puntos clave

• Quince altos directivos concentran hoy la mayor influencia empresarial del país, combinando reputación, liderazgo organizacional y presencia pública en una economía marcada por la concentración de poder.
• El listado incorpora tanto presidentes del Ibex como figuras clave de empresas familiares y tecnológicas, lo que refleja una diversificación del prestigio corporativo más allá del tamaño o el sector.
• La banca, la alimentación y la energía siguen siendo los sectores con mayor representación en la cúspide empresarial, aunque emergen nombres con menos visibilidad mediática y más capacidad de influencia estratégica.
• El ranking refleja un cambio generacional y simbólico en el ejercicio del liderazgo, con la consolidación de nuevas formas de autoridad, más transversales y conectadas con los desafíos reputacionales del presente.