El Índice de Precios de Consumo (IPC) ha elevado dos décimas su tasa interanual en junio, hasta el 2,2%, según los datos avanzados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con este repunte del IPC interanual en el sexto mes del año, la inflación vuelve a subir después de haber encadenado tres meses de descensos. Sin embargo, el ritmo de ascenso es inferior al del año pasado, ya que en junio de 2024, la inflación aumentó un 3,4%.
El organismo ha explicado que el aumento del IPC hasta el 2,2% se debe al encarecimiento de los carburantes, frente al descenso de precios experimentado en junio de 2024, y, en menor medida, a la subida del precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas, mayor a la registrada un año antes, según recogen fuentes de Europa Press.
Inflación subyacente
La inflación subyacente, sin alimentos no elaborados ni productos energéticos, se mantuvo en junio sin cambios en el 2,2%, igualando el dato del índice general, según ha informado el INE. Es importante recordar que se trata de datos preliminares, ya que los datos oficiales no se compartirán hasta el 15 de julio.
Subida del 0,6% en julio
El IPC ha aumentado en términos mensuales un 0,6%, es decir, en junio sobre mayo, una tasa cinco décimas superior y con la que se encadenan nueve meses consecutivos de alzas mensuales.
Del mismo modo, el IPC armonizado (IPCA), que mide la evolución de los precios de los bienes y servicios de consumo en la Unión Europea, ha elevado dos décimas su tasa interanual en junio, hasta el 2,2%, registrando un ascenso mensual del 0,6%. La inflación subyacente del IPCA se estima en un 2,2% para el mes de junio, según apunta el INE.
Evolución de la tasa interanual del IPC
Europa Press
Carburantes y alimentos
Cabe recordar que el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas elevó su tasa interanual cinco décimas en mayo, hasta el 2,5%. La subida de los precios de las frutas fue uno de los principales contribuyentes, con un incremento mensual del 7%.
Pero, según el INE, lo que realmente ha hecho aumentar el IPC en junio es la subida de los carburantes, que podría estar marcada por un contexto internacional complejo en Oriente Medio. En el mes de junio, la inflación en transportes se vio reducida un 1%, con una repercusión del 0,15% debida al descenso de los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales y el transporte aéreo de pasajeros, según informó el INE el mes pasado.
Valoración desde Economía
Fuentes del Ministerio de Economía han subrayado que el incremento de la inflación se ha dado “en un mes marcado por la incertidumbre en los mercados energéticos internacionales a raíz de la guerra entre Israel e Irán”.
A pesar del repunte, indican que “la inflación se mantiene contenida en entorno del nivel de referencia para el Banco Central Europeo (BCE)”. “España continúa con una situación de estabilidad y moderación de precios que, junto a los aumentos salariales, permite que los hogares sigan ganando poder adquisitivo”, han añadido desde la cartera dirigida por Carlos Cuerpo.
Una subida por encima de los pronósticos que no preocupa al BCE
Los analistas consultados por Reuters esperaban una inflación al 2% en junio en España, por lo que los datos preliminares mostrarían una subida dos décimas superior. La próxima semana se publicarán las cifras de inflación de junio en el conjunto de la zona euro. Las previsiones de Bloomberg apuntan a un 2%, frente al 1,9% de mayo.
Sin embargo, las agencias internacionales apuntan a que este ligero aumento de la inflación no es suficiente como para preocupar a los responsables del Banco Central Europeo, que son optimistas en cuanto al cumplimiento sostenible de su objetivo del 2% este año.
Previsiones de la zona euro
Las cifras están acordes con una situación de inflación relativamente benigna en la zona del euro, formada por 20 países, que ha permitido al BCE bajar los tipos de interés ocho veces en un año. Tras una probable caída por debajo del objetivo en 2026, el banco central calcula que una economía más fuerte -impulsada por un mayor gasto militar y en infraestructuras- elevará el crecimiento de los precios de nuevo al 2% en 2027.
Su presidenta, Christine Lagarde, ha indicado que la relajación monetaria está llegando a su fin, afirmando que el BCE está bien situado para afrontar retos que van desde las sacudidas al comercio mundial hasta, más recientemente, la guerra entre Israel e Irán. Sin embargo, la economía sigue siendo frágil y algunos de sus colegas no descartan nuevas reducciones de los costes de endeudamiento.
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