Radiografía de las pensiones de los autónomos españoles: hasta 500 euros menos que los asalariados

La diferencia entre el Régimen General y el RETA sigue ampliándose, con una pensión media que no alcanza el SMI y empuja a miles de profesionales a seguir en activo tras la jubilación

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Ana Cantero

Periodista especializada en asuntos internacionales y económicos

Actualizado a

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Una de las grandes preocupaciones de los trabajadores que se plantean darse de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) es cómo quedará configurada su pensión una vez se jubile o si se ven obligados a interrumpir su actividad. Según datos de la Seguridad Social del año 2023, un 86% de los autónomos en España elige la base de cotización mínima cuando se dan de alta, de unos 950 euros en 2025, comprometiendo así los subsidios por desempleo o por jubilación.

No obstante, es una decisión, en muchos casos, lógica: aumentar la base de cotización también incrementa a su vez la cuantía que hay que abonar mensualmente por realizar la actividad profesional y, sobre todo cuando un autónomo comienza a trabajar por cuenta propia, los ingresos mensuales son una incógnita. Aun así, muchos autónomos deciden no cambiar su base de cotización pese a estabilizar sus ingresos por temor a no poder hacer frente a los gastos. Lo que está claro es que es una decisión que compromete la pensión: hasta 500 euros de diferencia hay entre lo que cobra un autónomo y lo que cobra un asalariado en nuestro país.

Pensiones desiguales en el territorio español

Según datos de la Seguridad Social recopilados por la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) y facilitados a Líder Actual, actualmente de pensionistas en el RETA es de 2.005.983, con una pensión media de 908,59€ en el pasado mes de junio de 2025. Los datos incluyen todo tipo de pensiones y son bastante desiguales entre comunidades autónomas.

Por ejemplo, las comunidades autónomas que superan ese importe de pensión media -de todas las pensiones del sistema- son Aragón (958,44€), Castilla y León (910,27€), Cataluña (944,84€), Comunidad de Madrid (977,84€), La Rioja (948,9€), Navarra (1.034,63€) y, a la cabeza, el País Vasco con 1.075,66€ de pensión media. El resto, no lo hacen. La diferencia con el Régimen General, donde el importe de la pensión media es de 1.427,07€/mes, es de 518,48€ mensuales, un 57% más.

Un panorama que no mejora en la jubilación

Si hablamos de pensión de jubilación, la media en el RETA es de1009,12€ al mes. Situándose por encima de este importe medio de pensión de jubilación encontramos a Aragón con 1.062,94€, Asturias con 1.009,25€, Cataluña con 1.057,90€, Madrid con 1.088,60€, Navarra (1.148,18€), País Vasco con 1.197,07€ y la Rioja con 1.043,40€. 

En contrapartida, la pensión de jubilación media en el Régimen General se sitúa en 1.665,48€/mes, 656,36€ mensuales más que en el RETA. Así, los trabajadores autónomos reciben una pensión media que, además, no alcanza el Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Vivir con 1000 euros al mes

Desde UPTA consideran esta situación “alarmante”, por lo que instan a incrementar un 12% las pensiones de los autónomos durante cuatro años para acortar la brecha con los asalariados. El organismo defiende “un cambio estructural que permita garantizar una pensión digna a los trabajadores autónomos, conscientes de la desigualdad existente”.

A su juicio, la implementación del sistema de cotización por ingresos reales es un paso “positivo”, ya que permitirá ajustar las aportaciones al nivel de ingresos de cada trabajador, lo que podría repercutir positivamente en las futuras pensiones, aunque “seguirá siendo insuficiente”. “No podemos permitir que los autónomos que han dedicado su vida laboral a sacar adelante un negocio y que han contribuido al crecimiento económico del país estén condenados a la pobreza al llegar a la edad de jubilación”, lamenta Eduardo Abad, presidente de UPTA.

Trabajar después de jubilarse, casi la norma

Una de las principales consecuencias de esta situación es que muchos autónomos se vean obligados a trabajar después de alcanzar la edad de jubilación. De hecho, según UPTA, el colectivo de los autónomos representa actualmente más del 90% de la jubilación activa en España. Además, añaden que, de los más de 58.000 jubilados activos del colectivo autónomo (2024), únicamente el 28% cobra íntegramente la pensión.

“En gran medida se debe a la insuficiencia de las pensiones recibidas por el colectivo y por la propia naturaleza del trabajo autónomo”, explican desde la entidad, que calcula que en los próximos años se van a jubilar aproximadamente medio millón de autónomos, por lo que la mejora de las condiciones de la jubilación activa “garantizaría la sostenibilidad del sistema de pensiones”.

Puntos clave

  • Los autónomos reciben hasta 500 euros menos de pensión media que los asalariados
  • En el caso de la pensión por jubilación, la diferencia asciende hasta los 600 euros
  • Esta situación obliga a muchos autónomos a continuar trabajando después de jubilarse, constituyendo el colectivo un 90% de la jubilación activa en España
  • UPTA pide aumentar las pensiones de los autónomos un 12% durante cuatro años para reducir esta brecha